Con una muestra artística, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, junto al de Justicia y del Derecho, el INPEC y el ICBF, reivindicaron los derechos de las mujeres ante 120 internas de la cárcel El Buen Pastor.
Bogotá, 2 de septiembre de 2024. Al Centro Penitenciario El Buen Pastor, en Bogotá, el Ministerio de las Culturas, los Artes y los Saberes llevó una muestra artística que disfrutaron 120 mujeres privadas de la libertad, con el objetivo de reivindicar los derechos de las mujeres y la equidad de género, por medio del arte y la cultura.
Durante el evento, también, se dio a conocer cómo el programa presidencial Sonidos para la Construcción de Paz está llegando a 58 centros penitenciarios del país, y en este se contó con la presencia del viceministro de las Artes, y la Economía Cultural y Creativa, Jorge Ignacio Zorro, así como la de la viceministra (e) de Política Criminal y Justicia Restaurativa (e) del Ministerio de Justicia y del Derecho, Mariana Ardila Trujillo.
De esta manera, el teatro del penal se convirtió en un escenario de emociones, poder femenino y esperanza por medio de la obra de danza ‘La Imagen Perfecta’, a cargo de la compañía de danza TE&M Ballet Creativo.
“La cultura es definitiva para la transformación de cualquier ser humano. Es decir, queremos transformar las mentes de toda nuestra gente. Hay que cambiar eso a través de la sensibilidad, de esos imaginarios de violencia que han llevado a que estás personas se encuentren en estos estados de reclusión. Hay que llevarles el arte para que les permita desarrollar esa sensibilidad”, expresó el viceministro Zorro.
‘Cultura para la libertad’ nace de la alianza entre los Ministerios de las Culturas, las Artes y los Saberes, de Justicia y del Derecho, y así como del INPEC y el ICBF, iniciativa con la que el año pasado se atendió a 1.500 personas privadas de la libertad y este año, bajo la sombrilla del programa Presidencial Sonidos para la Construcción de Paz, se espera llegar a 5 mil.
La subdirectora de educación del INPEC, Nataly Rincón Tovar, explica cómo este último programa ha incidido en la población beneficiaria. “Fue un cambio significativo, drástico, porque aquellas orquestas que eran empíricas, el Ministerio de las Culturas las ayudó a empoderarse. Empezó un trabajo de afinación, de mantenimiento de instrumentos, pero, sobre todo, de modificar el pensamiento del privado de la libertad, potencializaron esa habilidad de ser músicos y empezaron a posicionar que el músico es profesional y puede vivir de ello”.
Así mismo, el programa presidencial ha cobijado a 21 madres acompañantes y 25 madres gestantes privadas de la libertad, mediante laboratorios de creación artística y musical para la primera infancia, así como con el fortalecimiento de espacios para la práctica artística y musical en la perspectiva de derechos culturales.
Daniela Montero, interna de la cárcel el Buen Pastor, y quien fue una de las internas que participó de la actividad, dejó un contundente mensaje a quienes viven en libertad. “Que no nos juzguen por estar acá, porque todos somos humanos y cometemos errores. Y nosotras somos muy valientes al asumir muchos obstáculos que nos pasan, y estos nos fortalece a nosotras como personas y nos brinda herramientas para salir y afrontar el mundo”.
El Ministerio de las Culturas, los Artes y los Saberes, con el programa presidencial Sonidos para la Construcción de Paz, seguirá llevando oferta artística a los diversos centros penitenciarios, como parte de la mayor apuesta cultural del Gobierno del Cambio, al llegar a los 32 departamentos del país, priorizando los municipios más afectados por el conflicto armado.
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